BUENA INTENCIÓN O MALA DECISIÓN
COMO SABER SI NUESTRAS INTENCIONES SON VERDADERAMENTE UNA BUENA DECISIÓN? TE INVITO A LEER ESTO DE SEGURO TE VA AYUDAR MUCHAS COSAS
EN Estados
Unidos, un hombre llevó al banco un cheque de 25.000 dólares con la intención
de abrir una cuenta a plazo fijo, pero el banquero le aconsejó que invirtiera
en la bolsa, afirmando que, a la larga, las acciones nunca pierden valor. El
hombre decidió seguir el consejo. Al poco tiempo, su inversión sufrió una baja
considerable.
Esta
experiencia ilustra lo difícil que es tomar buenas decisiones. A lo largo de la
vida tomamos decisiones muy diversas, muchas de las cuales marcan la diferencia
entre el éxito y el fracaso y tarde o temprano entre la vida y la muerte.
¿Cómo podemos, entonces, asegurarnos de tomar decisiones acertadas?
La Biblia está llena de ejemplos de buenas y malas
decisiones, por ejemplo la decisión de Adán y Eva al tomar del árbol del bien y
del mal trajo tristes y dolorosas consecuencias.
La decisión equivocada de Adán y Eva quedó
registrada para siempre en las escrituras. Y al igual que ellos, cada uno de
nosotros debe tomar decisiones similares diariamente. Querámoslo o no, la
encrucijada de escoger entre el bien y el mal surge constantemente en nuestras
vidas, y la decisión equivocada es casi siempre la más tentadora. ¿Qué
determina cuál camino tomaremos?
La base de nuestra decisión
Todo lo que decidimos y hacemos en la vida es
producto de lo que hay en nuestra mente; 'El hombre bueno, del buen tesoro de
su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca
lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca' (Lucas 6:45).
El 'corazón' es el conjunto de los pensamientos y
emociones que motivan nuestras acciones y decisiones.
En la Biblia encontramos muchas escrituras que
subrayan la importancia de cuidar nuestra mente. En los Salmos, por ejemplo,
encontramos el siguiente ruego basado en este principio: 'Inclina mi corazón a tus testimonios, y no a la avaricia. Aparta mis
ojos, que no vean la vanidad; avívame en tu camino' (Salmos 119:36-37).
Y el apóstol Pablo también nos aconseja alimentar
nuestra mente con pensamientos positivos para mantenerla sana: 'hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo
honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen
nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad'
(Filipenses 4:8).
En otras palabras, podemos prepararnos para ser
capaces de tomar el camino correcto en una encrucijada. La manera de hacerlo es
enfocar nuestra mente en el bien y en los resultados positivos de las buenas
decisiones. Pero, ¿será esto suficiente?
La lucha
En una de sus cartas, Pablo describe la lucha
interna que enfrentaba a nivel personal. El apóstol reconocía que a menudo
debía escoger entre dos caminos muy diferentes: el que sabía que era correcto y
el que más le atraía (aun sabiendo que era el errado).
'...queriendo
yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí. Porque según el hombre
interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra ley en mis miembros, que
se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado
que está en mis miembros. ¡Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de
muerte?' (Romanos 7:21-24).
Como vemos, decidir bien era un problema incluso
para el apóstol Pablo. Y además confiesa que muchas veces se veía tentado a
tomar el mal camino: 'Y yo sé que en mí,
esto es, en mi carne, no mora el bien; porque el querer el bien está en mí,
pero no el hacerlo. Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no
quiero, eso hago' (Romanos 7:18-19).
Si aún para Pablo era difícil tomar el buen camino,
¿qué sucede entonces con el resto de nosotros?
Sea como sea, debemos tomar buenas decisiones sin
importar lo difícil que sea la lucha; de otra forma nuestras malas decisiones
nos llevarán a la muerte
EL ERROR DE ABRAHAM Y
SARAI (Génesis 16:1-5)
Sarai mujer de Abram no le daba
hijos; y ella tenía una sierva egipcia, que se llamaba Agar. Dijo entonces
Sarai a Abram: Ya ves que Jehová me ha hecho estéril; te ruego, pues, que te
llegues a mi sierva; quizá tendré hijos de ella. Y atendió Abram al ruego de
Sarai.
Dios había prometido a Abraham una
descendencia, y sería a través de Sarai. Pero ante diez años de espera, Sarai
se impacienta y propone a Abraham buscar por su propia cuenta la solución a su
situación. Con facilidad por deseos personales o porque consideramos que ha
pasado mucho tiempo, terminamos haciendo las cosas a nuestra manera y en
nuestro tiempo, y no en el de Dios. La consecuencia de esta decisión no paro
solo con el nacimiento de un niño o un adulterio encubierto por parte de la
mujer sino que Ismael es el padre de la religión musulmana de donde son todos
los árabes, Afganistán, pakistaníes, siria, irac, irán, Egipto, marruecos,
Nigeria, Argelia etc de donde es una gran personaje que le a dado un gran dolor
de cabeza al mundo su nombre hossama bin laden
Veamos otro caso: génesis 30:16
Cuando,
pues, Jacob volvía del campo a la tarde, salió Lea a él, y le dijo: Llégate a
mí, porque a la verdad te he alquilado por las mandrágoras de mi hijo. Y durmió
con ella aquella noche. Seis fueron los hijos que Jacob tuvo con lía .Rubén,
Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zabulón y
fueron estos los que atentaron contra la vida de uno de sus hermanos
génesis 37:27,28 Venid, y vendámosle a los ismaelitas, y no sea nuestra mano
sobre él; porque él es nuestro hermano, nuestra propia carne. Y sus hermanos
convinieron con él. Y cuando pasaban los madianitas mercaderes, sacaron ellos a
José de la cisterna, y le trajeron arriba, y le vendieron a los ismaelitas por
veinte piezas de plata. Y llevaron a José a Egipto.
José era hijo por parte de Jacob y Raquel sus hermanos por parte de lia lo odiaban porque era el más amado de su
padre
DAVID TRASLADA EL ARCA DEL PACTO
En los textos que hemos leído vemos el momento en el cual
el rey David tenía una muy buena intención, trasladar el arca de Dios a su
reino en Jerusalén.
No hay duda que la intención de David era buena, el deseaba
tener el arca que representaba para los judíos la presencia de Dios en medio de
ellos.
Pero lastimosamente David para llevar a cabo su buena intención
tomo una mala decisión pues quiso trasladar el arca haciéndolo a su
manera (vs 7) la
subió a un carro nuevo que era jalado por bueyes.
Pero el problema de esa decisión es que no era la forma como
Dios había dejado establecido de como el arca debía ser llevada (1 Crónicas 15:2)
DE ESTA HISTORIA PODEMOS SACAR UNA LECCIÓN MUY IMPORTANTE PARA
NUESTRA FAMILIA:
Nuestras buenas intenciones no están por sobre la voluntad de
nuestro Dios.
Tenemos que comprender que Dios no quieres solo buenas
intenciones, él quiere obediencia a su palabra y a su voluntad.
APLIQUEMOS AHORA ESTA HISTORIA PARA NUESTRAS FAMILIAS:
Verdaderamente muchas familias hoy mismo están sufriendo consecuencias muy
difíciles por haber tenido buenas intenciones pero lastimosamente tomaron
decisiones sin consultar a Dios, sin tomar en cuenta su voluntad.
Tenemos que comprender que muchas veces las buenas intenciones
que tenemos pueden ser aprobadas por nuestros prójimos, por nuestros hermanos
en Cristo, o por nuestros pastores, pero eso no significa que sean aprobados
por nuestro Dios (1
Crónicas 17:1-4)
BUENAS INTENCION PERO
UNA MALA
Es
una buena intención compartir la vida con alguien que amamos y que nos ama,
pero es una mala decisión vivir juntos sin estar casados (1 Corintios 7:8-9) Notemos que la
palabra de Dios dice: Si no tienen don de continencia, cásense, no dice vivan
juntos o sean amigos con derecho
Si esa persona con la que tienes la buena intención de compartir
tu vida con ella no quiere nada de matrimonio, significa que no quiere
compromisos y eso significa que no hay amor, porque el amor se compromete.
Si ya convives como pareja desde hace varios años y ya tienes hijos con
tu pareja, es una buena intención el querer casarse pero es una mala decisión
no hacerlo pronto (hebreos 13:4) Muchas parejas han venido al camino de Dios solo conviviendo con sus
parejas sin estar casados, pero por medio de la palabra de Dios han comprendido
que necesitan ordenar sus vidas.
El problema es que tienen la buena intención de casarse pero toman la
mala decisión de esperar hasta que tengan dinero para hacer una boda con una
gran celebración, con muchos invitados, con mucha comida etc. Recuerda que la
mejor decisión es honrar a Dios con nuestra vida, quizás nunca podrás agradar a
las personas pero debes esforzarte por agradar a Dios con tu relación de
pareja.
Es una buena intención querer consolar, ayudar y animar a alguien pero
es una mala decisión confiar demasiado y abrir por completo el corazón (2 reyes
20:12-17) El rey Ezequías
recibió con una buena intención a los enviados de Babilonia que venían a
visitarlo por su enfermedad. Él tuvo la buena intención de ser
hospitalario de ser un buen anfitrión y tomo la mala decisión de confiar
demasiado y les mostro todos los tesoros que habían en su casa, todas sus
riquezas, le mostro la casa de sus armas, etc. Por eso el profeta Isaías
reprendió al rey porque por todo lo que los enviados de Babilonia vieron
Es una buena intención querer que nuestra familia este mejor
económicamente, pero es una mala decisión querer hacerlo cueste lo que cueste (ISAIAS
31:1) Cuántas familias en
nuestros países latinoamericanos están muy mal económicamente por haber puesto
la confianza en un país, y no en Dios. Muchas familias hoy están
endeudadas por los préstamos que hicieron para poder viajar ilegalmente a los
Estados Unidos y al final no pudieron llegar. Muchas familias perdieron
sus terrenos, sus casas, porque tuvieron que venderlas para pagarle a la
persona que los llevaría a buscar su sueño americano. La mejor decisión
es buscar la guía de Dios en nuestra vida, recordemos que las buenas
intenciones no superan la voluntad de nuestro Dios
Conclusión para la toma de decisiones
Si usted comienza con las
preguntas correctas, es más probable que encuentre las respuestas correctas.
Pero si empieza con las preguntas equivocadas, se habrá perdido desde el principio
