Síndrome de Boerhaave: Experiencia en el manejo de una Fístula Esófago-Pleural
El síndrome de Boerhaave, que representa aproximadamente el 15% de las perforaciones esofágicas, puede surgir en pacientes con esofagitis eosinofílica, inflamación crónica del esófago con un riesgo de perforación del 2%.
El síndrome de Boerhaave, que constituye aproximadamente el 15% de las perforaciones esofágicas, puede surgir en pacientes con esofagitis eosinofílica, una inflamación crónica del esófago con un riesgo de perforación del 2%.
Las perforaciones esofágicas, aunque raras, presentan desafíos considerables en su tratamiento, especialmente cuando generan una fístula esófago-pleural. La terapia endoluminal asistida por vacío emerge como una solución innovadora, aplicando el principio de drenaje y granulación utilizado en heridas externas.
Compartimos un caso excepcional: un hombre de 24 años con esofagitis eosinofílica, complicada con rotura esofágica y fístula esófago-pleural. Abordamos este caso de manera no quirúrgica mediante terapia endoluminal asistida por vacío, posiblemente la primera experiencia documentada.
Este caso destaca cómo un paciente con esofagitis eosinofílica, perforación y fístula esófago-pleural fue tratado con éxito mediante endoscopia, cierre asistido por vacío con esponja y prótesis esofágica. Después de 7 días, la endoscopia reveló un tracto fistuloso recurrente, lo que llevó a la retirada de la prótesis y la aplicación de un nuevo cierre asistido por vacío, resultando en tres cambios antes de la resolución completa de la fístula.
La endoscopia a los 3 días mostró una mucosa esofágica epitelizada, y a los 46 días, el paciente fue dado de alta, demostrando que la terapia endoluminal asistida por vacío puede ser una opción efectiva y novedosa en casos de esofagitis eosinofílica con fístula esófago-pleural posterior al síndrome de Boerhaave.
Link del video: https://www.youtube.com/watch?v=MC7wbY1AByA