Balón intragástrico

La obesidad es una de las principales preocupaciones de salud pública a nivel mundial. A pesar de los esfuerzos por mantener una alimentación saludable y un estilo de vida activo, muchas personas no logran perder peso de manera efectiva. En este contexto, el balón intragástrico se ha convertido en una opción popular y efectiva para quienes buscan perder peso sin someterse a una cirugía invasiva.

¿Qué es el balón intragástrico?

El balón intragástrico es un dispositivo médico de silicona que se coloca dentro del estómago de forma temporal. El procedimiento se realiza mediante una endoscopia, sin necesidad de cirugía, y el balón se llena con una solución salina para ocupar espacio dentro del estómago. Esto genera una sensación de saciedad, ayudando a las personas a comer menos durante el día y facilitando la pérdida de peso.

El balón suele permanecer en el estómago durante un período de 6 meses. Durante este tiempo, los pacientes reciben acompañamiento médico y nutricional para asegurar que el tratamiento sea efectivo y que el proceso de pérdida de peso se mantenga saludable.

¿Cómo funciona el balón intragástrico?

El principio detrás del balón intragástrico es sencillo: al ocupar espacio dentro del estómago, el balón disminuye la capacidad del órgano para recibir alimentos, lo que lleva a una sensación de llenura con menor cantidad de comida. Esto ayuda a controlar el hambre, reduce el consumo de calorías y facilita la pérdida de peso. Sin embargo, el tratamiento debe ser acompañado por un estilo de vida saludable que incluya una dieta balanceada y ejercicio regular.

¿Quiénes son los candidatos ideales para el balón intragástrico?

Este tratamiento está indicado principalmente para personas que:

• Tienen un índice de masa corporal (IMC) de 30 a 40 (sobrepeso u obesidad moderada).

• No han logrado perder peso mediante métodos convencionales como dietas y ejercicio.

• Buscan una solución menos invasiva que la cirugía bariátrica.

• Están dispuestas a seguir un plan de seguimiento nutricional y médico para asegurar el éxito del tratamiento.

Es importante recordar que el balón intragástrico no es adecuado para todos, por lo que es necesario consultar con un gastroenterólogo especializado para evaluar la idoneidad de este tratamiento.

Beneficios del balón intragástrico

1. Pérdida de peso efectiva: Los pacientes pueden perder entre 10 y 20 kilos en promedio, dependiendo de su compromiso con el tratamiento y el seguimiento adecuado.

2. Sin cirugía: A diferencia de otros procedimientos quirúrgicos para perder peso, el balón intragástrico no requiere incisiones ni hospitalización prolongada.

3. Mejor control del hambre: La sensación de saciedad inducida por el balón hace que los pacientes coman menos y tengan menos antojos, lo que facilita el proceso de perder peso.

4. Reducción de comorbilidades: La pérdida de peso resultante puede ayudar a mejorar la salud en general, reduciendo el riesgo de enfermedades asociadas con la obesidad, como la diabetes tipo 2, hipertensión y enfermedades cardíacas.

Consideraciones importantes sobre el tratamiento

Aunque el balón intragástrico es un procedimiento seguro, es importante tener en cuenta algunos aspectos antes de tomar la decisión de realizarlo:

• El balón debe ser retirado después de 6 meses para evitar complicaciones a largo plazo.

• Durante el tratamiento, los pacientes deben seguir una dieta rigurosa y un plan de ejercicio supervisado para maximizar los resultados.

• El tratamiento no es una solución definitiva si no se mantiene un estilo de vida saludable después de la extracción del balón.

El Dr. Max Peña, gastroenterólogo y experto en endoscopia digestiva, ofrece este tratamiento de balón intragástrico con la más alta calidad y profesionalismo. Con más de 20 años de experiencia en el área de la gastroenterología, el Dr. Peña proporciona un enfoque integral para asegurar que cada paciente obtenga los mejores resultados posibles.

Además de la colocación del balón, el Dr. Peña y su equipo brindan un acompañamiento personalizado para ayudarte a alcanzar tus objetivos de pérdida de peso y mejorar tu calidad de vida.